domingo, 4 de diciembre de 2011

Primeras revistas femeninas de moda.




Aunque las revistas femeninas europeas existen desde el siglo XVII, será en el XVIII, y sobre todo en el XIX, cuando se desarrolle un modelo de publicación que persigue la ilustración de la mujer y que, en mayor o menor grado, se ocupa también de aspectos más frívolos o mundanos.

Tradicionalmente se considera La Pensadora Gaditana, de Beatriz de Cienfuegos, como la primera revista femenina española; esta colección de ensayos se publicó en Cádiz en 1786. Pero será en el Romanticismo cuando florezca el género de las revistas de modas gracias a los avances técnicos en materia de impresión, que permitieron la extensión del grabado en color y posibilitaron una mayor difusión de los nuevos modelos e ilustraciones.

París se convierte en estos años en capital de la moda, y sus figurines, dibujados por ilustradores que copiaban los trajes y no por diseñadores, se difunden por toda Europa como armas de seducción. Gracias a los figurines y a las descripciones de los modelos, las revistas se erigen en creadoras y difusoras de tendencias y se convertirán en el auténtico referente de la moda.
En España, estas revistas de modas, publicadas sobre todo en Madrid y Barcelona, solían regalar con cada número un figurín que incluía uno o dos trajes a color, e incorporaban entre sus páginas explicaciones y dibujos sobre todo tipo de vestidos, complementos y tocados.

Entre 1829 y 1868 salieron a la luz más de treinta títulos de revistas dedicadas a la moda. Por su importancia, podríamos destacar El Correo de las Damas, primera revista femenina hispánica, editada en La Habana en 1811; El Correo de la Moda, La Moda Elegante y La Moda, aunque muchas otras revistas ilustradas de la época incluían información sobre modas entre sus páginas.
En bastantes casos sus redactoras eran mujeres de clase alta que se ocupaban de estos temas para entretenerse. La presente pieza se trata de un cartel anunciador de una de estas revistas, y destaca por la excelente calidad del figurín.










BIBLIOGRAFIA: http://biblioteca.universia.net/html_bura/ficha/params/title/paris-moda-revista-moda-periodico-familia/id/38363791.html

logos de moda

DOLCE & GABBANA
FENDI


ANDRÈ COURRÈGES


EMPORIO ARMANI




 CHANEL


LOUIS VUITTON
                                          

CAROLINA HERRERA
IVES SAINT LAURENT
DONNA KARAN NEW YORK
CALVIN KLEIN

VERSACE
VICTORIA'S SECRET
HERMÉS
POLO RALPH LAURENT
TOMMY HILFIGER
LACOSTE
BALENCIAGA
GIVENCHY
GUCCI
GIORGIO ARMANI
LANVIN


MADELAINE VIONETTE
PIERRE CARDIN
JEAN PATOU
PACO RABANNE
VALENTINO
VIVIENNE WESTWOOD

domingo, 13 de noviembre de 2011

Emilio Pucci Spring/Summer 2012 colección. Milan











Vídeo de :www.youtube.com ,Subido por el 04/10/2011

EMILIO PUCCI.


La marca de Emilio Pucci es una de las firmas italianas más antiguas del prêt-á-porter femenino. Esta firma refleja la isla de Capri, sus colores, su vida, su luz. En uno de los libros publicados por Mariuccia Casadi sobre esta firma de ropa “El estilo Pucci se oponía completamente a los principios de la costura francesa de la época”, “eran libertad y atrevimiento”. Hoy en día todavía Pucci es el símbolo de la dolce vita. Sus motivos gráficos, ópticos o psicodélicos seguirán siendo incomparables y modernos para siempre. Su historia comenzó en el Palacio Pucci, situado en Florencia, entre cuadros de Botticelli, Rafael y Leonardo da Vinci. Emilio Pucci nació en Nápoles, su familia provenía de la aristocracia rusa (su tatarabuela era sobrina de la emperatriz Catalina).
Durante el invierno de 1947, ofrece a una amiga, la fotógrafa Toni Frissell, quien trabajaba regularmente para la revista de moda Harper’s Bazaar, un conjunto de esquí de su creación, que consistía en un pantalón ajustado hasta el tobillo por una banda de cuero y un suéter impermeable con capucha que tenía un bolsillo ventral. Frissell respondió con gran entusiasmo al ver aquellos diseños que con seguridad no encontraría en ninguna tienda. Días después, las imágenes de este modelo estarían sobre el escritorio de Diana Vreeland, directora de la publicación estadounidense, muy interesada en reseñar la moda proveniente del otro lado del Atlántico.
El artículo no tardó en aparecer bajo el título “Diseños de un italiano esquiador”.La respuesta fue inmediata y los responsables de compras de la tienda por departamentos Lord & Taylor, de la 5ta. Avenida de Nueva York, encargaron de inmediato el diseño de una pequeña colección mixta, que incluyera el estilo de invierno y el deportivo, para ese momento el Marqués era todavía oficial del ejército. En 1949, durante un largo permiso que transcurre en Capri, reduce su creación a prendas de vestir fáciles de poner, entre las que destacan blusas cortas y pañuelos. Los tonos de la Costa Azul, el rosa de las buganvillas y el amarillo de las mimosas chocan en su cabeza, comienza a imaginar motivos teñidos de colores extremadamente vivos.
“Colores naturales, precisa Laudomia Pucci, heredera de la firma. Él los había visto mezclarse en el paisaje de Capri, su lugar preferido de descanso, e incluso en Florencia, donde años más tarde, establecería su taller. Donde mi padre estuviera, cerraba los ojos para imaginar las asociaciones de colores”. En 1950, el oficial renuncia a su carrera militar y abre una tienda, La Canzone del Mare, en la Marina Picolla. Su pequeña boutique se convirtió en la guarida de la alta sociedad de vacaciones en Capri, situación que no compartía ni su familia ni los de su rango, pues consideran inconveniente trabajar.
Sin embargo, el marqués se burla de ellos, pues para ese momento ya era considerado “El Príncipe del Estampado”. Cuando los aristócratas se acercaban a ver la tienda de ese “excéntrico” que había caído tan bajo, entonces era el momento en que éste los tomaba como escoba y limpiaba el suelo con ellos, al quedar cautivados con sus diseños.
“Mi padre se consideraba a sí mismo tanto diseñador como artesano. Creaba sus propios motivos y buscaba nuevos materiales, pero sobre todo, estaba atento al corte de los trajes, pues soñaba siempre con embellecer y modernizar el cuerpo de la mujer”. Las pruebas de los nuevos diseños se realizaban regularmente sobre cuatro modelos de medidas diferentes. Era la creación en movimiento, ya que iba corrigiendo el patrón hasta que el diseño quedara perfecto en el cuerpo de sus cuatro modelos. Gracias a sus criterios de corte, su moda sería adquirida por un gran número de féminas. Las creaciones eran también funcionales, y aunque siempre la marca se asocia a la seda, también uso muchos tejidos de algodón, así como la tela de toalla para confeccionar conjuntos playeros que, todavía en la actualidad, se utilizan por su frescura bajo el sol.











Bibliografía : http://www.ofertasropa.com/marcas/emilio-pucci/  . Imágenes : www.google.es

Bernard Arnault, presidente del grupo fabricante de bienes de lujo más grande del mundo.


Bernard Arnault es uno de los hombres más ricos del mundo, en términos de posición ocupa el número 4 con una fortuna de 41 mil millones de dólares según la revista Forbes (2011),
a parte de ser el hombre más rico de la Unión Europea y uno de grandes empresarios del momento. A él se debe la creación del imperio "LVHM", un gigantesco grupo empresarial que aglutina las firmas más lujosas y famosas del mundo,uno de los grupos son la moda, con firmas como : 

·LOUIS VUITTON
·CÉLINE
·LOEWE
·BERLUTI
·KIENZO
·GIVENCHY
·MARC JACOBS
·FENDI
·STEFANOBI
·EMILIO PUCCI
·THOMAS PINK
·DONA KARAN
·NOWNESS
·DIOR
·YSL









Bibliografía: http://es.wikipedia.org/wiki/Bernard_Arnault . 
Esta página fue modificada por última vez el 29 oct 2011, a las 12:42.
                    

martes, 1 de noviembre de 2011

Rose Bertin.











                                                       Bibliografía:
                     Video de Youtube Subido por el 12/09/2011

Rose Bertin, Ministra de modas.



Bertin fue aprendiz de modista a muy temprana edad, a los 15 años llega a París. Abrió su propia tienda de ropa - Le Grand Mogol- en 1770 y rápidamente encontró clientas entre las influyentes damas de la nobleza.
Cuando María Antonieta llega de Austria a Francia, acoge los nuevos estilos y modas como forma de mostrar su sincera dedicación a su nuevo país.
Dos veces a la semana, después de la coronación de Maria Antonieta, Bertin presentaba sus nuevas creaciones a la joven reina y pasaba horas discutiendo sus creaciones. La reina adoraba su guardaropa y estaba apasionada con cada detalle y Bertin su sombrera se convirtió en su confidente y amiga.
En la mitad del siglo XVII, las mujeres francesas habían comenzado a hacerse el “pouf” (crecer, alargar) sus cabellos con colchas y pomadas y usaban grandes y lujosos vestidos.
Bertin usaba y exageraba las modas más importantes para María Antonieta con peinados de alturas sobre los tres pies. La moda del Pouf alcanzó tales extremos que se convirtió en la marca del periodo, junto con decorar el cabello con ornamentos y objetos que mostraban eventos recientes.

La moda continuó su fluctuante progreso; y los sombreros y adornos de la cabeza altísimos con sus superestructuras de gasa, flores y plumas, impedían a las mujeres encontrar carruajes suficiente altos para entrar, y muy a menudo se les veía inclinadas, o manteniendo sus cabezas adornadas fuera de la ventana.
Si el uso de estas extravagantes plumas y adornos en la cabeza hubiera continuado dicen las memorias de este periodo muy seriamente, habría efectuado una revolución en la arquitectura. Hubiera sido necesario agrandar las puertas y techos de los teatros, y particularmente el cuerpo del carruaje.
Una vez la reina ordenó los más recientes looks a Rose Bertin, entre ellos el provocativo “robe a la polonaise”, con el corpiño que realzaba el pecho, con ondulantes faldas que descubrían los tobillos, el conjunto era coronado por un "pouf".A partir de los años 1780 un cierta anglomania se traduce en la moda, María Antonieta adopta esta anglofilia usando el redingote (riding coat- abrigo de montar a caballo), con lo que ofende a los patriotas franceses.

María Antonieta luciendo la polémica
"robe chemise"hecha por Bertin. Retrato de
Vigée-Lebrun, 1783




En 1780 Élisabeth Vigée-Lebrun retrató a María Antonieta luciendo la famosa "robe chemise" diseñada por Rose Bertin, lo cual fue tan escandaloso para su época que se tuvo que pintar un segundo retrato de la Reina con un adecuado
vestido de corte.




Llamada "Ministro de la Moda" , Bertin fue la mente tras casi todos los nuevos vestidos comisionados por la Reina. Los Vestidos y el cabellos se convirtieron en el vehículo personal de la expresión de María Antonieta, y Bertin vistió a la reina desde 1770 hasta su destronamiento en 1792 Bertin llegó a ser la figura más poderosa de la corte, sus largos y ostentosos trajes aseguraban que quien los usara tomaría al menos tres veces más espacio que su contraparte masculina, en este sentido daba a la figura femenina una imponente, no pasiva, presencia. Sus creaciones también establecieron a Francia como centro de la moda, y desde entonces los vestidos hechos en París fueron enviados a Londres, Venecia, Viena, St. Petersburgo y Constantinopla.
El nombre de Bertin se convirtió en sinónimo de elegancia y de los excesos de Versalles. La cercana relación de Bertin con la Reina la proveyó de una valiosa experiencia en cuanto al significado de la moda en el aspecto social y político en la corte francesa.
Los precios de Rose Bertin era exhorbitantes, así lo documentan los records anuales de los gastos de ropa de María Antonieta en las cuentas de la modista, pues la reina nunca usaba nada dos veces; los trajes y sombreros de Bertin podían fácilmente costar 20 veces más de lo que una hábil costurera de la época ganaba al año.
Durante la Revolución Francesa, cuando muchos de sus nobles clientes fueron ejecutados (incluyendo la reina, guillotinada) o huyeron al extranjero, Bertin traslado su negocio a Londres.
Eventuralmente Bertin regreso a Francia en 1795, donde Josefina de   Beauharnais (primera esposa de Napoleón) se volvió clienta por un tiempo, pero encontró que esos excesos de la moda de la era se habían debilitado luego del fin de la Revolución Francesa. Al iniciar el siglo XIX, Bertin transfirió su negocio a su sobrina y se retiró. Murió en 1813 en su casa de Epinay sur Seine.
































        Bibliografía : http://es.wikipedia.org/wiki/Rose_Bertin . Modificada por    última vez el 12 feb 2011, a las 19:18.
        

domingo, 16 de octubre de 2011

HISTORIA DE LA MÁQUINA DE COSER


 
La primera máquina de coser fue patentada en 1790 por el inventor británico Thomas Saint. La máquina de Saint, que estaba diseñada para coser piel y tela, usaba un único hilo y formaba una puntada en cadena. No se usaba aguja sino una lezna para perforar el material que se estaba cosiendo. Otro mecanismo colocaba el hilo a través del agujero, tras lo cual una vara parecida a una aguja con un punto hendido llevaba el hilo a través de la parte inferior, donde un gancho recogía el hilo y lo llevaba a la parte delantera para la siguiente puntada. Cuando el ciclo se repetía se formaba un segundo bucle con el primero en la parte inferior de la prenda, creando así una cadena y el cierre de la puntada. Sin embargo, la máquina de Saint nunca pasó del prototipo.

La primera máquina práctica de coser fue la fabricada en 1829 por el sastre francés Barthélemy Thimonnier. Éste empleaba una aguja en forma de gancho que se movía hacia abajo mediante un pedal y volvía a su posición inicial mediante un muelle. Al igual que la máquina de Saint, ésta producía una puntada en cadena. Cuando Thimonnier instaló 80 de sus máquinas en una empresa de confección, los sastres de París lo llevaron a la quiebra y terminó por morir arruinado en Inglaterra.



 

La primera máquina de puntada cerrada fue creada por el inventor estadounidense Walter Hunt hacia 1834. La máquina, que empleaba al mismo tiempo una aguja con un ojo en la punta y una lanzadera oscilante, no se patentó en el momento de su invención, de forma que cuando más tarde Hunt intentó obtener una patente, su petición fue desatendida por motivos de abandono. Trabajando de forma independiente el inventor estadounidense Elias Howe desarrolló una máquina que contenía los mismos elementos básicos que la de Hunt y la patentó en 1846.

 






Otro inventor estadounidense, Isaac Merrit Singer, patentó una máquina similar y Howe ganó la demanda que interpuso contra él por usurpar su patente. Singer, sin embargo, fue responsable de la combinación de varias patentes en el campo de las máquinas de coser y de sentar las bases para la producción en serie de estas máquinas.
 

domingo, 9 de octubre de 2011

LA AGUJA


La aguja se utiliza desde hace más de 20 mil años. En la Prehistoria se hacían de madera, roca o hueso para fabricar prendas rústicas y burdas que protegían del frío y la intemperie, también con esto utilizaron la aguja para fabricar sus casas, que las cubrían con pieles y tenían que coserlas para dejarlas en una sola pieza.

En el neolítico Por otro lado, el telar aparece permitiendo vestir a los hombres de otra forma, un poco más elaborada. Una maquinaria un tanto extraña hace su aparición aquí, que consistía en un bastidor que servía para tensar los hilos y a su vez se trenzaban con otro que servía a modo de aguja de tejer.
Y más tarde, comenzaron a hacerse de hierro o de metal lo cual las hizo mucho más resistentes y durables.

En la Época Antigua, la vestimenta se cosía a mano con agujas de madera que sustituyeron a los huesos de animales. La aguja, no tenia ojo como la conocemos ahora sino un pequeño gancho en el cual se ataba el hilo; para dotar a la aguja de ojo fue necesario una serie de desarrollos posteriores.
Durante la Edad Media, en Alemania, se cambió la aguja de madera por una de hierro, y su uso se propagó por el resto del mundo gracias a la navegación.

En la Época Moderna, Bartolomé Thimonnier, un sastre francés de modestos recursos económicos, inventó, en 1830, una máquina de coser que se asemejaba aun más al modelo actual, y que empezó a tener éxito en Francia. Sin embargo, un grupo de obreros, temerosos de que la máquina los dejara sin trabajo, destruyeron el taller y las máquinas. Thimonnier murió en la pobreza. Mientras tanto, el norteamericano Gualterio Hunt, había inventado, casi simultáneamente, una máquina de coser que tenía una aguja curva, con el ojo en la punta. Esta aguja hacía pasar un hilo a través de la tela para formar un lazo. Por éste pasaba un segundo hilo con el que se formaba una costura de cadeneta. El segundo hilo era llevado por una lanzadera, como en las máquinas modernas. Hunt no logró obtener una patente. El honor de haber patentado, en 1846, la primera máquina de coser que realmente se utilizó le corresponde al norteamericano Elías Howe. Isaac M. Singer obtuvo una patente sobre su máquina de coser en 1851. No obstante, Howe defendió con éxito su prioridad y obtuvo el pago de derechos de invención sobre casi todos los tipos de máquinas de coser utilizados en aquella época.

El impacto que tuvo en la sociedad el surgimiento de la aguja fue importante por el impulso que le dio a la elaboración y confección de ropa en todo el mundo, en la medicina por el uso de jeringas denominada aguja hipodérmica, y además surgen otros distintos tipos de agujas para distintos usos. Su uso se extendió rápidamente por su eficiencia y practicidad.


REGISTRO ARQUEOLÓGICO
Son numerosos los yacimientos prehistóricos donde
encontramos agujas en hueso, correspondientes a
Paleolítico superior y elaboradas por Homo sapiens. Se
localizan agujas, pero también varillas; éstas son iguales
a las agujas, pero la diferencia que presentan es que no
están perforadas, no presentan el ojo para ser enhebra-
das. La mayor parte de ellas pernenecen al Magdalenien-
se (aproximadamente 15.000 años). En el Norte peninsu-
lar hallamos muchos yacimientos de estas cronologías.
Encontramos agujas en Altamira o El Pendo (Cantabria),
Las Caldas (Asturia), Alós de Balaguer (LLeida), pero
también en Mosseguellos de Vallada (Valencia), Esteban-
vela (Segovia), etc. Carnac en Francia cuenta con intere-
santes ejemplos. Allí donde se establece Homo sapiens
queda patente el uso y el empleo de las agujas, que
están mostrando la importancia de cubrirse y protegerse
del frío.